Desde el primer momento, del mismo modo que al "corredor de fincas" Moritz, nos agrede sin miramientos un narrador vehemente, que no nos soltará hasta haber dicho todo lo que tiene que decir. Desde la primera frase, una larga parrafada erizada de conjunciones que se atropellan y de incidentes que se imbrican, la cosa está clara: o bien dejamos el libro, o bien tomamos impulso para no detenernos hasta el final. Todo, entonces, se esclarece muy rápidamente, las alusiones se precisan, los agravios se apuntalan con argumentos sobrecogedores, con ejemplos alucinantes y grotescos, retomados y desarrrollados sin dejar nada en la sombra. Lo sabremos todo sobre Moritz y su familia, sobre los dos Suizos ("y sobre todo la Persa"), lo que viene a buscar en ese agujero perdido, poblado de inquietantes austríacos, donde compran a precio de oro un terreno invendible, para construir allí una mansión de pesadilla.
"Sí es una obra de arte, y todo aquel que no quiera perderse la literatura de su tiempo, debe leerla... Si existe una literatura actual en lengua alemana capaz d subsistir al lado de Musil y de Kafka, hela aquí"
(em penso que és del pròleg de Luis Goytisolo a l'edició castellana)
https://www.casadellibro.com/libro-si/9788433930088/382014
i un comentari a fons del gran Kovaklski
http://elmundodekovalski.blogspot.com.es/2010/11/si-de-thomas-bernhard.html